Desde Compromís per Alacant se ha denunciado hoy que “la situación del puerto de Alicante esté viéndose gravemente afectada por el abandono de las grandes navieras, que ha provocado pérdidas tan significativas como 30.000 contenedores anuales de la empresa Levantina que ahora tienen que dirigirse a los puertos de Valencia o Cartagena”.

 

Antoni Arques, miembro de Compromís per Alacant, ha indicado que “la desaparición de estas grandes navieras está encareciendo las exportaciones alicantinas y, en consecuencia, nuestra economía se está volviendo menos competitiva y hace más difícil que el Puerto de Alicante recupere posiciones respecto a sus competidores más directos”.

 

“Después del descenso de la llegada de cruceros, ahora nos encontramos con una gran caída del tráfico de contenedores, una situación que deja en un punto muy difícil el puerto alicantino, sin que observemos ninguna reacción para mejorar la situación”, ha indicado.

 

En este sentido, Antoni Arques ha lamentado que “el presidente de la Autoridad Portuaria, José Joaquín Ripoll, no se haya pronunciado al respecto ni haya presentado ninguna medida para contrarrestar esta situación, una actitud que deja totalmente en entredicho su capacidad para dirigir esta institución”.

 

“Estas son las consecuencias de que el PP utilice el Puerto de Alicante para colocar a sus defenestrados políticos y de escoger como presidente a una persona imputada en uno de los principales casos de corrupción de nuestro territorio, lo que hace que tengamos un presidente más preocupado de sus asuntos judiciales que de gestionar correctamente el puerto”, ha concluido.